En los últimos años, muchos futbolistas peruanos
habilidosos, técnicamente correctos y con potencial para trabajar y lograr un
crecimiento apto para llegar a ser estrellas del futbol mundial han salido al
extranjero, en su mayoría a Europa. Algunos de estos han logrado establecerse y
adaptarse de manera correcta, aceptando los sacrificios y superando las piedras
que se les presentaron en el camino, para hacerse un nombre en el difícil mundo
del futbol y así ser conocidos mundialmente. Definitivamente el máximo
exponente de este ejemplo es Claudio Pizarro, criticado por muchos por su ´bajo
rendimiento´ con la Blanquirroja, pero que logró hacerse de un nombre y se
encuentra alternando, aún a su edad (36 años), en el mejor equipo del mundo, el
Bayern Múnich. Sin embargo, hay otros casos con finales no tan felices, de
jugadores que regresaron al país en busca de continuidad ya que no estuvieron
dispuestos a aceptar los sacrificios del futbolista y a esforzarse al máximo
para lograr ser alguien en el futbol. La frase más común es “Volver al país no
es un retroceso”.
Claramente, en el aspecto de suma de minutos, es
positivo que los jugadores vuelvan para jugar en los primeros equipos. Sin
embargo, el trabajo fuera de las canchas, el entrenamiento físico, el trabajo
de gimnasio, la suplementación y alimentación, y la lejanía que tienen los
jugadores del medio del espectáculo son aspectos que hacen del viejo continente
un ambiente más apto para el crecimiento de un futbolista. Sobre todo de uno joven
y en vías de crecimiento.
Pero, ¿por qué se regresan los jugadores peruanos?
Personalmente, considero que es un tema que engloba varios factores pero que la
principal razón es la idiosincrasia del futbolista peruano. La impaciencia en
el caso de algunos jugadores, que salieron muy jóvenes y planeaban descocerla
en el futbol mundial de manera inmediata, sin trabajar en su formación física y
táctica, es una clara razón de los que ocurre con el peruano. El caso más
claro, Reimond Manco, la estrella de los ´jotitas´ y un proyecto de ´crack´ que
cuando se toma las cosas en serio puede llegar a un nivel superlativo. Sin
embargo, sigue siendo el mismo Manco menudo que partió a los 18 años a Holanda,
diferentemente a Farfán quien reveló un notorio cambio físico luego de su
evolución a lo largo de los años en el PSV, que lo llevó a ser multicampeón de
la liga tulipán y estrella del equipo.
Otro caso de sacrificio que conllevó a frutos es el
de Carlos Zambrano, actual central del Eintrach Frankfurt. El ´León´ es indiscutible
en su equipo luego de atravesar un proceso de desarrollo en el futbol alemán,
comenzando por el Schalke 04 II (el equipo filial), para luego pasar al equipo
principal del cual se tuvo que retirar por falta de minutos, pero sin embargo
continuo su aventura europea en el St. Pauli, donde sumó los minutos requeridos
para que la temporada siguiente su actual equipo lo fiche.
Espero sinceramente que los nuevos jugadores que
salen al extranjero, dígase Renato Tapia, Sergio Peña, Alexander Callens, Andy
Polo, y los que seguirán saliendo, aprovechen bien las oportunidades, se
desarrollen bien técnicamente, se potencien físicamente y de esta manera podrán
aportar a una selección que sufre de ansiedad por ausencia de triunfos y
alegrías.
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