Y es así como un
día volvió, renació de las cenizas en las que se encontraba para hacer las
cosas bien desde el inicio y lograr lo que todos los hinchas ‘ediles’ querían
desde que se fue hace 7 años, volver al único lugar donde pertenece. Esta nota
deja de lado todo el análisis, táctico y técnico, para envolver si quiera un
poco del sentimiento que representa el ‘Muni’. Deportivo Municipal, uno de los
clubes más representativos del país sufrió, sudo y trabajó para poder
finalmente celebrar y el pasado 30 de noviembre marcar su vuelta a la Primera
División del Futbol Peruano. Sin embargo, uno no puede entender el sentimiento
si no es hincha del ‘Muni’, si no ha gritado, llorado y alentado a la franja en
las buenas y en las malas, si no ha sufrido la cuota necesaria para poder
llamarse hincha de verdad.
Y es así como
uno que no es hincha verdaderamente necesita ayuda para llegar a tener una
mínima idea de lo que significa el Muni para sus hinchas. Y de esta manera, un
verdadero hincha del Muni es aquel que está acostumbrado a un tipo de pasión
diferente a la de ganar un título, es seguir alentando por más de tener todas
las situaciones en contra, de tocar literalmente el fondo y estar al borde de
la desaparición, es mantener la esperanza en el equipo y sus jugadores, es
sufrir sin pedir nada a cambio. Y es que el Muni es familia, ya que es una de
las herencias más importantes que un padre hincha de “La Academia” le puede
dejar a un hijo, la pasión de vivir para alentar a Deportivo Municipal, en las
buenas y en las malas y desde la niñez hasta la muerte.
Este 2014,
Municipal se puso las pilas desde el inicio y repatrió a jugadores de la casa
como Masakatsu Sawa y Aldo Olcese, a los que se les sumaron las contrataciones
de jugadores que no contaban con los minutos que quisieran en sus equipos como
Mauricio López, Adrián Zela o Manuel Calderón, y logró armar un plantel de
hombres para que luche arduamente las 30 fechas del complicado Torneo de la
Segunda División. Con una pretemporada estricta antes de iniciada la temporada
regular, “La Acadé” comenzó a marcar a paso firme el camino de su regreso
triunfal. Con un juego regular durante todo el campeonato llegó a la última
fecha contra Unión Huaral con 17 triunfos, 7 empates y 5 derrotas que lo
colocaban en el primer lugar de la tabla y con todas las chances de dar la
vuelta y pegar el salto sin escalas al Torneo Descentralizado. Luego de vencer
2-0 en el partido final la algarabía se desató y todos los hinchas “ediles”
celebraron al borde de las lágrimas este nuevo ascenso.
Lo increíble del
‘Muni’ es que puede llegar a conmover a cualquier ser humano, aunque uno sea
hincha de otro equipo. El simple hecho de ver a todos estos hinchas alentando
sin parar, de todas las edades, abuelos, padres e hijos, provenientes de todo
el país, unidos en una sola voz para formar “La Banda del Basurero”. Y es
cuando uno conoce a un hincha del Municipal, porque lo increíble es que todos
los hinchas de Muni sin excepción con hinchas de verdad, que uno vive y puede
ver directamente todo lo que engloba.
No sé si es coincidente,
no sé si es triste o un motivo de alegría, pero este ascenso coincide con el
año del deceso de uno de los más grandes ídolos de ‘La Academia’, Roberto ‘Tito’
Drago. Más allá de ser una tristísima noticia para el Perú entero, este ascenso
es definitivamente el mejor homenaje que se le puede dar a un hombre
identificado hasta la médula con el equipo de la franja, y definitivamente
Municipal tiene un nuevo ángel guardián que desde el cielo seguirá alentando.
Creo que todos
esperamos con ansias volver a ver la histórica camiseta blanca con franja roja
en los principales escenarios del país, ya sea luchando por no descender, por
el título o para la simple alegría de sus hinchas. Porque Muni es sentimiento,
es corazón, es alegría y tristeza, pero sobretodo es familia, y eso es lo que
yo personalmente admiro del Deportivo Municipal.
Como ya dije,
aquel que no es hincha no puede comprender el significado que engloba serlo
particularmente del Muni. Es por eso que finalmente quisiera agradecer a Alonso
Vásquez por orientar este artículo y darme una idea más clara de lo que
significa el Muni para él, su papá y todo el pueblo ‘edil’.